Infierno

Llegó hoy de donde no quiso contar, que es el Infierno. El infierno, que es triste y trueno, aprisiona de fuegos a los más grandes: los Anhelos.

Errores de sintaxis

Diré fue anoche que canté junto a la banda. Ya miramos cerca nuestro próximo evento: el nueve de un mes hermano al que transcurre hoy será. ¿Felices o tristes?, ¿ansiosos del venir estamos? No recuerdo si recordé que habría de escribir lo que ahora escribo: juego inútil de palabras.

Se me ha ocurrido, en uno de esos vaivenes en que la mente te acorrala, la palabra baloncesto: si hubiese tenido a Freud enfrente justo en este momento él ya hubiera psicoanalizado el porqué del fluir de esta palabra que emprende su recorrido con una be grande y lo termina con una letra O: mera especificación innecesaria si el texto que lees ahora es cuerdo. !Mas la cordura sólo habrá de poseerla el Príncipe de las Certezas!

Como ya es sabido por las lenguas sabias y viceverza, agrada al gusto humano todo aquello que sea descarga -por ello la intención de citar sin razonamiento previo la palabra baloncesto, ante un mundo de ojos: es necesario encestar, ganar, lograr que el objeto penetre sus ideas- pues la descarga es y habrá de ser colmo de placer, fuente innegable de éste.

Y para terminar ¿qué más decir?: nada. Dormitaré en esta casa que ha quedado desierta desde hace algunos días -no me hagas forzar los recuerdos, que puedes sacarme el tapón-, desde que Guadalupe se marchó. Pero Guadalupe, !oh bravura del tiempo!, retornará a quebrantar silencios.

Carta breve -o simulacro de ella- al Dios de la Verdadera Redención

Distinguido padre de la mierda y de las flores:

Tú que haces todo, tú que cuando mi mala educación percibes sueles convertirme en un sapo o en una víbora o en una liendre, a ti al que todos temen menos Nadie:

De la agonía del presuntuoso, háblame mañana, que hoy quiero ver llamas de noche. No quiero ser un jerarca más de la escatología. No, hoy no, prefiero el placer. No, no quiero ser un jerarca más de la escatología.

Gracias.

Vacuidad

De la rectitud del excéntrico no habrás de hablarme, pues éste carece de ciudades. Su tiempo, su espacio es rededor de inexistencias. Así que, guiados al rumbo de la solidez relativa, fiados a la muerte del cúlmino: ausentemos trazos de rectas rectas que nuestras manos han escrito; entonces, equilibremos nuestras ansias de instinto y así, por siempre así, calmidad celeste, rededor difunto: vivamos.

Para videntes corazones.

Fui a Catedral, vi tocar a Eclipse de Son. Vi un Eclipse. Vi catedral, pero no entré y es pecado. Vi beatas perfumadas demasiado: mi olfato se dio cuenta y además de oler, ve. El olfato se acarrea un instinto parecido al de los felinos: ¿seremos felinos de vez en cuándo?

En fin, soy una nube despojada de su antes amada tierra. Amo los despojos, así como amo a quienes me aman y odian amándome. Soy un títere de los anhelos y disfruto de los males encarnados.

Amo también estar desnudo en estos momentos. Amo exhibirme por no sé cuál razón o quizá sí la sepa pero no apoyo la idea de autoexplicarme a cada rato.

Amo a Ti.

Rebeldía: un fin.

La verdadera rebeldía no es una actitud tonta ni vacua, es una filosofía, un más allá de todo estado reunido, una escala al vacío de la esterilidad presente.

No desaparece la rebeldía del rebelde auténtico. La rebeldía está adjunta al yo que no desmiente. Los distorsionadores del Concepto y la Idea han hecho de la rebeldía un idioma ausente de sus realidades.

Sin más que aportar a sus ojos abiertos, pauso mis dedos y me entrego a la vida.

Cielos de vida.

Cansa, hastía, fatiga el renombre de lo nombrado.
Cansa, hastía, fatiga el renombre de tu nombre.

!No más decoraciones insensatas, no más tedio de iglesias, no más falsos terrores!
!No más perfumes de indecencia, no más recuerdos, peripecias; no más verdades, no más errores!

¿Hacia qué país o territorio el que haya bebido de las aguas venenosas partirá?
¿Cuál es el rumbo que indica la verdad, cuál es el rumbo a la encaminada Paz?

Cúspides que inexisten cuando el oleaje melancólico avoraza el vientre de la vida.
Cúspides que el vacío añorante sepulta suelos, cielos de vida.

A mi abuela Irma, recientemente fallecida.

A mi abuela Irma, recientemente fallecida,
con todo el amor merecido
de su más -palabras de ella- grosero y rebelde
nieto:

Tu espíritu que me vive
Y hurga las profundidades
Y descifra con sigilo
Lo que antaño
No fue y ha sido

Tu espíritu que placidamente
De un vivir dormido
Despierta
Y vive la fiesta
Del renacer cautivo

Tu espíritu que es el juego serio
De descifrar las causas
Y los colores

Tu espíritu que es la llave
Inmersa de las aguas
Salobres

Tu espíritu, tu corazón siempre Jesús,
Tu corazón siempre bomba
Y las espinas que al final
Vivieron el aroma

Tu espíritu siempre después tangible,
Dador del alba anochecida,
Clarear del centelleo inmerso,
Viveza y fuego,
Anochecer y día

Tu espíritu, colmo de la hechicería,
Compás cabalgante,
Furor del desafío, cantante,
Aire del espacio eterno,
Tiempo del mejor del tiempo.

Los colmillos de la veracidad.

No porque un hombre le haya dicho puta a alguna mujerzuela es ya así por así un machista automático: !Existen verdaderas putas, como tú! !Existen verdaderas perras que sólo se dedican a ladrar, como tú!

Mudos los dedos.

La epidemia del mayor de los trastornos vuelve fatuos los linderos de cualquier camino. Se enrojece el alma sin estarse vivamente, cuando el aire contenedor de todas las sombras, usurpa el trono de la candidez de las palabras.

Inicios de un poema no acabado.

Yo no me encuentro en un proceso lógico de mejoría
Ni tiento las llagas del dolor del inexperto;
Yo no canto despedidas de un empeoramiento
Ni recorro con mesura los renglones de un mejor regreso

Re-emprendida.

Poco a poco de los pocos, adaptándome al Hermosillo del nacer, al Hermosillo de mi suerte. Climas para combatir los males aires, del estío hablar querer y sin embargo no poder. Abuela ha fallecido, mas el duelo sobrellevará las causas cuando el día deje de finjir oscuridad y teja y cante y finja el contorno ensombrecido por las luces del disfraz que embauca. Hoy ensayo con los Sona, fiesta por la noche en algún burdel. Y como de pescar y de intentarlo estoy cansado, resultará mejor tenerme un pescado ya pescado en el pasado o alguna que otra pescadilla muy pecada del pecado.

Nota: No sólo se hace el amor en las camas.

Y mis tíos confundir madurez total con adultez gratuita. Y mis tíos, que a mi importancia besan falsamente, confundir lo cuerdo loco, y lo mucho poco.

Y como contestó Sabina en alguna entrevista de hace años, he aquí mi información, y volviendo al tema de antaño extinto por escasos segundos: "!no follo tanto como en mis canciones!". Ja,ja,ja,ja,ja,ja.